Estado de Necesidad: Del Artículo 20 a la Práctica Judicial [con Ejemplos]

¿Qué es el estado de necesidad y cómo se aplica? ¿Qué límites éticos y legales existen cuando una persona, ante circunstancias extremas, toma decisiones que causan daño a un bien jurídico para evitar un mal mayor? Estas son las preguntas que responderemos en este artículo, donde analizaremos el estado de necesidad, desde sus condiciones fundamentales hasta su influencia en la pena y su interpretación en la jurisprudencia.

Descubre cómo se ponderan los bienes penalmente protegidos, la relevancia de la intencionalidad en la provocación de la situación de necesidad, y el papel crucial de la profesión o cargo en la obligación de sacrificio.

¿Qué es el Estado de Necesidad?

El estado de necesidad es un eximente de responsabilidad penal, que parte de la base de la Teoría del delito, la cual si no dominas te dejo nuestro artículo que te la explica con ejemplos, y se encuentra regulado en el artículo 20 del Código penal, concretamente en su apartado quinto, estableciendo el propio artículo las condiciones para poder apreciar este estado de necesidad.

Pero en ¿Qué se diferencia de las demás eximentes? El estado de necesidad supone una situación en la que una persona causa un daño en un bien jurídico de otra persona, para evitar un mal propio o ajeno.

Esta definición parece un poco general, pero con el siguiente caso lo entenderás al completo. Un supuesto de estado de necesidad sería el de una persona se encuentra atrapada en un edificio en llamas y, ante la imposibilidad de encontrar una salida segura, decide romper una ventana de una propiedad ajena, que podría ser un delito de daños, para escapar y evitar sufrir daños mayores.

¿Por qué el estado de necesidad tiene una definición tan general? Porque es una eximente que se puede adaptar a un gran número de situaciones, y una definición más exhaustiva lo limitaría.

Pongamos otro caso, el de evitar un mal ajeno: Si alguien se encuentra en una situación en la que es testigo de un intento de secuestro y la única forma de evitarlo es tomar prestado un vehículo sin permiso para perseguir al secuestrador y rescatar a la víctima. Esta es la típica situación que has visto en las películas en la que alguien para un coche y se lo apropia para salvar a otra persona.

Condiciones del Estado de Necesidad

Como hemos adelantado el propio artículo 20 establece tres condiciones para que se pueda apreciar esta eximente:

• Que el mal causado no sea mayor que el que se trate de evitar. Sobre esto nos extenderemos más en el apartado de la jurisprudencia, pero a grandes rasgos se trata de ponderar los bienes penalmente protegidos.

Por ejemplo, en el caso del secuestro, si además de adueñarnos temporalmente del coche ajeno, matáramos a su propietario no podríamos aplicar el estado de necesidad, ya que estamos matando a una persona para evitar un secuestro.

• Que la situación de necesidad no haya sido provocada intencionadamente por el sujeto. Por ejemplo, siguiendo con el incendio, en caso de que esa persona atrapada en un edificio en llamas hubiera provocado el incendio para justificar un delito con el estado de necesidad, este no podría ser apreciado.
• Que el necesitado no tenga, por su oficio o cargo, obligación de sacrificarse. Imaginémonos que dos personas se están ahogando y encuentran una tabla de madera, como regla general, ninguna tendría prioridad, pero si una de ellas fuera socorrista tendría por su oficio obligación de sacrificarse.

El Estado de Necesidad en la Jurisprudencia

En primer lugar, nos gustaría mencionar la STS 5996/1998 de 19  de octubre de 1998, que dice que deben concurrir para poder estimar el estado de necesidad como eximente los siguientes requisitos, ampliando los ya vistos regulados en la ley:

1. La existencia de un mal propio o ajeno, acuciante y grave que no es preciso haya comenzado a producirse, bastando con que el sujeto crea la existencia de una situación de peligro y riesgo intenso y que requiera realizar una acción determinada para atajarlo.
2. Necesidad de lesionar un bien jurídico de otro o de infringir un deber con el fin de evitar aquella situación de peligro.
3. Que el mal o daño causado no sea mayor que el que se pretende evitar, debiéndose ponderar en cada caso concreto los intereses en conflicto para poder calibrar la mayor, menor o igual entidad de los dos males.
4. Que el sujeto que obre en ese estado de necesidad no haya provocado intencionadamente tal situación y;
5. Que ese mismo sujeto, en razón de su cargo u oficio, no esté obligado a admitir o asumir los efectos del mal pendiente o actual, es decir, que no tenga el deber de sacrificarse.

Por otro lado, nos queda una gran duda por resolver, ¿Es la necesidad económica un estado de necesidad? Veamos las siguientes dos sentencias que nos lo aclararán:

• STS 2961/2008, establece que la necesidad económica no es un estado de necesidad que se pueda considerar válido a efectos de la eximente ya que este estado de necesidad tiene que cumplir además los requisitos de: Mal acuciante, no siendo suficiente un mal general o con un largo periodo de tiempo; y que sea necesario la lesión del bien jurídico para soslayar la situación de peligro.
• La STS 5532/1999  de 13 de septiembre de 1999, precisa que, aunque la estrechez económica permite, por sí, acudir al estado de necesidad, en cualquier caso, el agotamiento en la búsqueda de otros remedios, incluso de carácter asistencial, es necesario para poder apreciar la eximente.

Por tanto, podemos concluir que la necesidad económica podría considerarse estado de necesidad, siempre que se trate de un mal acuciante, es decir de una situación extrema y que se haya intentado previamente acudir a otros medios.

Debemos precisar que todo esto deberá ser examinado en cada caso y deberá ser el Juez o Tribunal el que aprecie dicha necesidad.

La hora de la verdad ¿Cómo influye en la pena?

Como hemos adelantado, el estado de necesidad es una de las Eximentes del código penal, si quieres conocer las demás con casos reales te recomiendo nuestro artículo. Se denomina eximente porque exime completamente de la pena.

Sin embargo, esta no es la única opción, ya que puede aparecer el estado de necesidad sin todos sus requisitos. ¿Qué sucedería en este caso? Que se apreciaría una eximente incompleta, es decir, un atenuante.

Si quieres conocer más sobre los Atenuantes te dejo nuestro artículo en el que se explican todos ellos. En caso de que se reconociera un atenuante se aplicará la pena en su mitad inferior, y si llegáramos a dos atenuantes se podría aplicar la pena inferior en uno o dos grados.

Ejemplos prácticos

Ejemplo 1- Lesión para Evitar Accidente de Tráfico

Un conductor se encuentra en una carretera y observa que otro vehículo se aproxima a gran velocidad en sentido contrario. Para evitar un accidente inminente, realiza una maniobra arriesgada que podría lesionar a otro conductor, pero salva a ambas partes de un choque frontal. Esta conducta ignorando el estado de necesidad podría ser catalogada de conducción temeraria y por tanto constitutiva de delito.

Ejemplo 2- Acción Inmediata para Evitar Ataque Animal

Una persona se encuentra en un área remota y es amenazada por un animal salvaje. Toma la decisión de escalar un muro de una propiedad ajena para evitar ser atacado por los animales salvajes. En este caso, ignorando el estado de necesidad podríamos estar ante un allanamiento de morada, si el Juez o tribunal aprecia ese estado de necesidad, que como has visto cumple todos los requisitos, quedará exento de pena.

Conclusiones

A lo largo de este artículo sobre el estado de necesidad, has descubierto requisitos que rodean esta eximente de responsabilidad penal. Comenzando con la pregunta fundamental sobre qué constituye el estado de necesidad, hemos desentrañado sus condiciones esenciales delineadas en el artículo 20 del código penal.

El concepto de estado de necesidad, aunque definido de manera aparentemente general, lo has completado con conocimiento de la jurisprudencia, como la mencionada STS 5996/1998, que estableció los requisitos fundamentales, destacando la importancia de la existencia de un mal acuciante y grave. Además, hemos explorado la controvertida cuestión de si la necesidad económica puede considerarse como tal, concluyendo que, en casos extremos, podría ser reconocida siempre y cuando se cumplan los requisitos.

Finalmente, has aprendido sobre la influencia del estado de necesidad en la pena, y completado tu conocimiento con los ejemplos prácticos en los que has podido ver que el estado de necesidad puede aplicarse a un catálogo de situaciones muy amplio.

¡Espero que te haya gustado este artículo y nos vemos en el siguiente!