¿Qué son las medidas de seguridad y cómo se aplican? ¿Cuándo es apropiado su uso y qué implicaciones tienen para los individuos involucrados? ¿Cuál es la diferencia entre medidas privativas y no privativas de libertad? En este artículo, exploraremos en detalle el complejo panorama de las medidas de seguridad dentro del sistema judicial.

Desde su definición hasta su aplicación práctica, desentrañaremos el significado y la importancia de estas medidas en la búsqueda de justicia y rehabilitación.

En los siguientes apartados, analizaremos cómo se aplican estas medidas, los tipos existentes y sus implicaciones tanto para los individuos sujetos a ellas como para la sociedad en su conjunto.

Si deseas comprender mejor este aspecto crucial del derecho penal y cómo afecta a aquellos que las experimentan, acompáñanos en este viaje hacia el entendimiento profundo de las medidas de seguridad en el marco legal.

¿Qué son las medidas de seguridad? 2 Ejemplos

Las medidas de seguridad se podrían identificar como aquellas sanciones penales que el juez o tribunal toma en función de las circunstancias personales del sujeto y el delito cometido.

Estas medidas pueden ir acompañando a una pena de prisión, como, por ejemplo, el internamiento en un centro de desintoxicación, que sería un equivalente a esa pena de prisión. También pueden imponerse como “pena” única, por ejemplo, en los casos en los que el presunto culpable haya quedado exento de responsabilidad criminal, por los supuestos del artículo 20 del Código Penal.

Si necesitas conocer cuáles son los supuestos de exención de la responsabilidad penal, no te pierdas nuestro artículo en el que te lo explicamos con casos reales.

Además, debemos tener presente que las medidas de seguridad se regulan en los artículos 95 a 108 del Código Penal.

¿Cuándo se aplica medidas de seguridad?

El artículo 95 establece dos requisitos:

• Que el sujeto haya cometido un hecho previsto como delito. No es necesario que haya sido sancionado por este delito, con una pena que no sea medida, solo que lo haya cometido.
• Que del hecho y de las circunstancias personales del sujeto pueda deducirse un pronóstico de comportamiento futuro que revele la probabilidad de comisión de nuevos delitos.

Tipos de medidas de seguridad

El código penal distingue dos tipos de medidas, las privativas y las no privativas de libertad, teniendo cada una sus peculiaridades.

3 Medidas de seguridad privativas de libertad

• El internamiento en centro psiquiátrico. Esta medida será aplicada cuando el culpable quede exento de pena conforme al artículo 20.1 del CP, es decir, que sufra una anomalía o alteración psíquica.

Como podemos ver es una forma de sustitución de la pena de prisión, para que el culpable pueda ser tratado conforme a sus circunstancias, para que obtenga la ayuda que necesita.

• El internamiento en centro de deshabituación. Esta medida deberá aplicarse si se aplica la exención de pena conforme al artículo 20.2 del CP, es decir, que el culpable hubiera cometido del delito en estado de intoxicación plena, y que este no haya sido buscado.
• El internamiento en centro educativo especial. Esta medida será aplicada cuando el culpable quede exento de pena conforme al artículo 20.3 del CP, es decir, que sufra alteraciones en la percepción desde el nacimiento o desde la infancia

No debemos confundir estas medidas como una alternativa más “blanda” a la pena de prisión, recordemos que estas medidas son a su vez privativas de libertad, además deberán ser revisadas cada año por el Juez de Vigilancia penitenciaria, manteniéndolas, cesándolas, sustituyéndolas o suspendiéndolas.

Además, en todos los casos el interno no podrá abandonar el centro de tratamiento del que se trate sin la autorización del Juez o Tribunal sentenciador.

También debemos tener presente que estas medidas no podrán ser de una duración superior a la pena de prisión prevista para el delito del que se trate.

6 Medidas de seguridad no privativas de libertad

Entre ellas podemos encontrar:

1. La inhabilitación profesional.
2. La expulsión del territorio nacional de extranjeros no residentes legalmente en España. En tal caso, la persona no podrá volver al territorio español por un periodo de 10 años.
3. La libertad vigilada. Podrá vigilarse de distintas formas, mediante aparatos electrónicos, presentándose cada cierto tiempo en dependencias policiales, teniendo la obligación de comunicar sus cambios de residencia, entre otras.
4. La custodia familiar. El sujeto quedará al cuidado y vigilancia del familiar que se designe y que acepte la custodia, quien la ejercerá en relación con el Juez de Vigilancia Penitenciaria y sin menoscabo de las actividades escolares o laborales del custodiado.
5. La privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores.
6. La privación del derecho a la tenencia y porte de armas.

Para poder establecer estas medidas el Juez o Tribunal deberá valorar los informes emitidos por los facultativos y profesionales.

Estas medidas pueden ser impuestas conjuntamente con las medidas privativas de libertad.

¿Qué puede hacer el juez durante la ejecución de la medida?

El juez que hubiera impuesto la medidas de seguridad, durante la ejecución de la sentencia, podrá tomar las siguientes decisiones, tal y como permite el artículo 97 del Código Penal:

• Mantener la ejecución de la medida de seguridad impuesta.
• Cesar cualquier medida de seguridad impuesta en cuanto desaparezca la peligrosidad criminal del sujeto.
• Sustituir una medida de seguridad por otra que estime más adecuada, entre las previstas que sean más favorables, ya que si no se dejaría sin efecto.
• Dejar en suspenso la ejecución de la medida en atención al resultado ya obtenido con su aplicación. La suspensión quedará condicionada a que el sujeto no delinca durante el plazo fijado.

¿Qué ocurre si se incumple una medida de seguridad?

A tenor del artículo 100 del Código Penal, si se incumple una medida de seguridad, el juez o tribunal ordenará el reingreso en e centro determinado en la medida si fuera privativa de libertad.

Si la medida no fuera privativa de libertad el Juez podrá acordar la sustitución de la quebrantada por la de internamiento, es decir, por una medida privativa de libertad.

Medidas de seguridad y penas privativas de libertad

En el caso de que, sobre una misma persona se impusieras penas y medidas de seguridad privativas de libertad, deberá cumplir en primer lugar la medida, que se abonará para el de la pena.

Esto quiere decir que, si se ha impuesto una medida de internamiento en un centro de deshabituación por tiempo de dos años, y además una pena de prisión de ocho años, el penado cumpliría dos años en el centro, y los restantes seis en prisión.

Aunque debemos tener en cuenta, que una vez finalice la medida de seguridad, el juez o tribunal podrá, si considera que la ejecución de la pena pondrá en peligro los efectos conseguidos a través de la medida, suspender el cumplimiento del resto de la pena por un plazo no superior a la duración de la misma, o aplicar alguna de las medidas no privativas de libertad.

Es decir, el tiempo máximo de suspensión de la pena no puede ser más largo que el período de tiempo durante el cual la medida de seguridad estaba en vigor.

Por lo tanto, el tiempo máximo de suspensión de la pena dependerá de la duración de la medida de seguridad que fue alzada.

Ejemplos prácticos

Ejemplo 1- Internamiento en Centro de Deshabituación

Javier, un joven adicto a las drogas, es arrestado por robo para mantener su hábito de consumo. El tribunal, reconociendo que el delito fue cometido bajo la influencia de las drogas y con el fin de abordar su adicción, decide imponerle el internamiento en un centro de deshabituación en lugar de una pena de prisión, proporcionándole así la oportunidad de rehabilitarse.

Ejemplo 2- Inhabilitación Profesional

Marta, una abogada, es condenada por malversación de fondos de un cliente, y de deslealtad profesional.

Además de otras sanciones, se le impone la inhabilitación profesional como medida de seguridad, lo que no solo le prohíbe ejercer la abogacía, sino que también impide que acceda a ciertos roles en el sector legal durante un período determinado, como parte del proceso de rehabilitación y prevención de futuros delitos.

Ejemplo 3- Libertad Vigilada

Antonio es declarado culpable de delitos de violencia doméstica contra su pareja. El tribunal, preocupado por la seguridad de la víctima y reconociendo la necesidad de supervisión, impone a Antonio la libertad vigilada como medida de seguridad.

Esto implica que Antonio estará bajo estricta supervisión y control de las autoridades durante un período específico, con la obligación de cumplir ciertas condiciones para garantizar la seguridad de la víctima y prevenir la reincidencia.

Conclusiones

Al acabar este artículo sobre las medidas de seguridad en el ámbito judicial, has abordado una serie de conceptos fundamentales que han ampliado tu comprensión sobre este tema crucial.

Desde la comprensión de qué constituyen estas medidas y cómo se aplican, hasta el análisis detallado de los tipos de medidas privativas y no privativas de libertad, has adquirido un conocimiento profundo sobre este complejo entramado legal.

A lo largo de este texto, has asimilado la diferencia entre medidas privativas y no privativas de libertad, y has visto cómo estas medidas buscan no solo castigar, sino también rehabilitar y prevenir futuros delitos. Te has adentrado en la comprensión de cómo las decisiones judiciales sobre estas medidas impactan tanto a los individuos directamente afectados como a la sociedad en su conjunto. En resumen, has llegado a reconocer la importancia de un enfoque holístico en la justicia penal, que busca equilibrar la necesidad de castigo con la oportunidad de rehabilitación y la protección de los derechos de todos los ciudadanos.

¡Espero que te haya gustado este artículo y nos vemos en el siguiente!